La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha afirmado hoy en respuesta a una interpelación de Izquierda Unida en el Pleno del Senado que la decisión de integración de Feve en Renfe y Adif obedece a la necesidad de asegurar su viabilidad y a garantizar la continuidad del servicio y el mantenimiento del empleo.
El servicio que se prestará a los viajeros a partir del 1 de enero de 2013 será el mismo que el actual y no se van a producir supresiones de frecuencias ni cambios más allá de los necesarios para la correcta explotación del servicio. Sin embargo, con la integración sí que se disminuirán los gastos corporativos, eliminando la multiplicidad de sedes, se racionalizará la estructura organizativa, se optimizará el servicio, planificando horarios, frecuencias y trayectos y se utilizarán sinergias en las compras.
El objetivo de la integración, ha insistido la ministra, es “aumentar la eficacia” porque España no se puede permitir duplicidades por una variación en el ancho de las vías de medio metro. Por este motivo, Pastor ha afirmado que se han formado varios equipos de trabajo para garantizar una correcta integración.
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