Lo que está ocurriendo ahora mismo en los mercado con las aerolíneas no tiene relación con el impacto real del coronavirus chino sino con lo que se teme que pueda pasar. En Europa, no todas las compañías aéreas están igual de expuestas al tremendo pánico que puede durar meses en el Extremo Oriente, si no hay una expansión descontrolada.
Los asesores explican que en Europa, el peor problema lo tienen dos de las más grandes: AirFrance y KLM por un lado y por otro Lufthansa. Estos dos grupos tienen una seria exposición al Extremo Oriente y, de persistir este fenómeno, pueden sufrir serios impactos económicos. Sólo este lunes, Air France-KLM cayó un 6 por ciento y Lufthansa y 4 por ciento. Air France y KLM, como grupo, tienen un 21 por ciento de su oferta en la región y un 7, como Lufthansa, concretamente en China, con lo que el impacto puede ser considerable. En cambio, para su suerte, IAG, el grupo anglo español que abarca Iberia, British Airways y Aer Lingus, apenas tiene el 8 por ciento en toda la región, sobre todo por British Airways, y bastante menos en China.
Los demás grupos de aviación europeos, Ryanair o Easyjet, por ejemplo, no tiene exposición en la región pero, también, si esta situación persiste, notarán un impacto sensiblemente atenuado.
Este viernes Aeroflot, la compañía rusa, que ha construido parte de su éxito comercial en un hub en Moscú, que capta viajeros europeos para sus destinos de Extremo Oriente, anunció que acepta la cancelación o trasferencia de todos los vuelos de viajeros con destino a China de los próximos quince días.
En estos momentos, los inversores están atentos a la evolución de la pandemia que, por el momento, no ha causado grandes impactos económicos. En todo caso, es muy probable que el mes de febrero tenga cifras bastante malas en toda la región. Obviamente, el mayor impacto será para las aerolíneas chinas, cuyo mercado está concentrado en el país.
En cuanto a cadenas hoteleras, el impacto en estos momentos está muy limitado pero, de persistir esta crisis, y hoy todo apunta a ello, podría ocurrir que haya un efecto negativo notable. Entre las cadenas españolas, ninguna tiene una gran presencia en la región, pero Melià es la más expuesta, con diferencia. Igualmente es significativa la situación de Minor, el propietario de NH, que tiene el grueso de su negocio en la zona.
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo