Air Berlin aprieta las tuercas al sector turístico español

Air Berlin reducirá este invierno un 20 por ciento su capacidad en su hub del aeropuerto de Palma en comparación con el invierno anterior. La aerolínea suspenderá los vuelos desde Mallorca a Basilea, Dresde y Karlsruhe, dejará de operar en el aeropuerto de Murcia y en el alemán de Erfurt, y reducirá las frecuencias de los trayectos desde la capital mallorquina a Faro, Lisboa y Oporto. También reducirá la oferta de vuelos directos a Alemania, Austria y Suiza desde Alicante, Jerez y Málaga.

El director general para España y Portugal, Álvaro Middelmann, ha confirmado esta mañana en Palma lo que el sector turístico español venía temiendo desde que a finales de agosto trascendieran los resultados negativos del primer semestre, cuando Air Berlin perdió un 9,3% más que en el mismo periodo del año anterior.

Tres circunstancias explican estos malos resultados, que desembocaron en la dimisión con carácter inmediato del CEO, Joachim Hunold, y que repercutirán de forma inevitable en una subida del precio de los billetes: la escalada del precio de queroseno, la disminución de vuelos a Egipto y la nueva tasa de tráfico aéreo que se aplica a los vuelos que salen de Alemania. Middelmann ha sido especialmente crítico con la tasa de 16 euros por pasajero impuesta en los vuelos domésticos (los que unen ciudades del interior del país), “que está sirviendo para subvencionar los ferrocarriles federales alemanes”, ha dicho.

Unos datos negativos agravados por la estacionalidad, que por sí sola puede hacer que la reducción de capacidad “vaya a más si no hay producto turístico para vender”, ha advertido, y ha recordado el contraste entre Baleares y Canarias, donde la compañía ha programado para este invierno 290.000 plazas más.

Como primera compañía aérea de Son Sant Joan, Air Berlin ha transportado de enero a julio 4,2 millones de los 12,6 millones de pasajeros que han circulado por el aeropuerto mallorquín, uno de sus cuatro centros de interconexión de vuelos junto con los de Dusseldorf, Berlín y Viena. Esto ha supuesto un crecimiento del 11 por ciento, notable pero insuficiente para excluir a España de los recortes orientados a recuperar rentabilidad.

Las reservas mejoran

El invierno de 2011 vendrá marcado por la debilidad del mercado español, que se espera contrarrestar con el crecimiento de los viajes de negocio. La buena noticia es el crecimiento de las reservas desde Alemania (un 30%) y Austria y Suiza (un 60%). Según Middelmann, estos días la compañía está vendiendo desde Alemania 40.000 plazas diarias y la mayoría de ellas con destino a España.

Por otro lado, ha criticado las ocupaciones hoteleras excesivamente altas que se están produciendo este verano en Baleares y que “impiden dar al cliente un servicio con la calidad adecuada”. “La temporada se acorta cada vez más y se quieren llenar los hoteles como sea”, lamenta. También ha hecho un llamamiento al sector público y privado para combatir la estacionalidad y ha arremetido contra la figura de los fijos discontinuos. “Son un freno para la desestacionalización. Lo digo a pesar de que los sindicatos se me echen encima y también algunos empresarios a quienes estos empleados les resultan muy cómodos”.