Aunque hace ya varios meses que Estados Unidos y Europa han vuelto a permitir los vuelos de los aviones Boeing 737Max, en la sede del fabricante americano aún había nervios porque el primer mercado mundial de la aviación seguía sin dar el visto bueno. Hasta este jueves, China no dio el aprobado a la modificación del avión, para que volviera a operar. Beijing había sido primera en dejar en tierra los aviones de Boeing después del accidente de Ethiopian Airlines, en marzo de 2019, que mató a 157 pasajeros y tripulantes a bordo, apenas cinco meses después de que otro avión Boeing se estrellara en Indonesia, matando a las 189 personas, y ha sido de las últimas en aprobar las modificaciones (China Southern cancela una orden de compra de 64 Boeing 737 Max).
La Administración de Aviación Civil de China (CAAC) dijo que Boeing había abordado el rediseño y las "condiciones inseguras" de los aviones. La autoridad de aviación ofreció instrucciones a las aerolíneas sobre las revisiones necesarias, principalmente de los protocolos de seguridad, antes de que la aeronave vuelva a estar en servicio. La directiva significa que ahora no hay obstáculos regulatorios para el regreso del Boeing 737 MAX en China, aunque no estaba claro cuándo se reanudarán los vuelos. "La decisión de CAAC es un hito importante hacia el regreso seguro del 737 MAX al servicio en China", señaló Boeing en China en un comunicado. "Boeing continúa trabajando con los reguladores y nuestros clientes para devolver el avión al servicio en todo el mundo".
En el momento de la puesta a tierra, una docena de transportistas chinos tenían este modelo de avión en sus flotas, aproximadamente una cuarta parte de todos los aviones de este tipo en funcionamiento en todo el mundo, según datos de la Comisión de Administración y Supervisión de Activos de propiedad estatal que supervisa a las grandes compañías estatales.
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo