El secreto del proyecto de Norwegian era recibir los Boeing 737 Max y empezar a volar de Irlanda a Nueva York, para después reemplazar esta flota con los Airbus 321 que están en construcción y que son aviones ideales para este enlace. Pero algo va mal, desastrosamente mal: el fabricante de los Boeing ha retrasado su construcción por problemas técnicos y ha dejado el proyecto de Norwegian en el alero.
En realidad el problema no es de Boeing sino de CFM, que produce los motores LEAP 1B. Da lo mismo a los efectos de Norwegian, para quien el primer avión tenía que haber llegado en mayo, de cara a empezar a operar en verano.
Las cosas están un poco peor aún, porque Boeing no se atreve a decir cuándo estarán los nuevos aviones, de forma que Norwegian, que ya sabe que tendrá que retrasar su aventura, no tiene fechas para reorganizarse. Norwegian tiene un pedido de más de cien aviones 737 Max.
La primera medida de Norwegian ya adoptada es que la ruta entre Edimburgo y Stewart, al norte de Nueva York, no operará desde el 15 de junio, como estaba anunciado. Igualmente, la ruta entre Edimburgo y Oslo, que era un enlace que permitía a los noruegos beneficiarse de los vuelos baratos desde Escocia, también queda en suspenso, tras una tercera modificación de calendario.
Como todo se retrasa, las 42 frecuencias semanales de vuelos transatlánticos se van a ver provisionalmente reducidos a 14, hasta que Boeing pueda cumplir con el calendario de entregas. En el lado positivo para Norwegian, ningún competidor está interesado hoy en estas rutas y puede moverse con menos tensión que en rutas como las de Barcelona a América, que serán atendidas por los 787.
Buenas tardes,
El primer 737Max de Norwegian será entregado a la misma el 13 de junio llegando a Oslo el día 14.
Slds