No pueden imaginarse bien el caos de los aeropuertos londinenses este fin de semana. Sobre todo en Heathrow, que es el mayor de Europa. La culpa, al parecer, fueron las tormentas en el Atlántico que obligaron a British Airways a dejar en tierra a miles de viajeros, porque encima dos aviones sufrieron rayos en sus estructuras.
El huracán Beryl, del Caribe, provocó a la cancelación y el retraso de varios vuelos, lo que ocasionó problemas en cadena en Heathrow que, como se sabe, opera prácticamente al cien por ciento de su capacidad.
Este lunes, como efecto ya reducido del caos, se suspendieron 51 vuelos, con otros 125 durante el fin de semana.
En el caso de Gatwick, el segundo aeropuerto de Londres, la víctima fue Easyjet, que tuvo que suspender 34 vuelos, culpando de la situación al control aéreo de varios países europeos. La aerolínea naranja también dijo que algunos vuelos se habían cancelado por el mal tiempo.
De Europa?
Si, de Europa. ¿No sabes distinguir Europa de la UE?