Chipre: caos por la desbandada de ingleses huyendo a su casa

Es muy difícil explicar el caos generado este sábado en los aeropuertos de Larnaca y Paphos, en Chipre. Un caos, por cierto, absolutamente inútil.

Miles de ingleses habían volado a la isla para pasar unos días de vacaciones aprovechando que en su país los niños tienen días libres. Pero este jueves, el Gobierno de Londres anunció que desde este domingo todos los que regresen de Chipre tendrán que aislarse durante catorce días.

Es lo mismo que en su momento pasó con Portugal, que provocó escenas de caos en el aeropuerto de Faro.

Pero, como en Faro, también hubo sorpresa de última hora.

La razón para adelantar el viaje es que si regresaban a partir del domingo, se tenían que enfrentar con una cuarentena obligatoria de catorce días. Así, llegando antes, la evitaban.

Pero anoche hubo otra noticia: el Gobierno decidió implantar el confinamiento en todo el país hasta el próximo primero de diciembre. De manera que los que anticiparon su viaje y pagaron billetes a precios muy elevados para retornar a su casa y evitar catorce días encerrados se encontrarán no con catorce sino con un mes.

Este sábado veintiocho aviones visitaron los aeropuertos de Chipre, procedentes de Gran Bretaña, entre ellos British Airways, easyJet, Wizz Air, Ryanair, Jet 2 y Tui.

Sólo desde Larnaca, la capital, volaron 1.659 personas.

Los viajeros que acudieron a Chipre en realidad huían de otros destinos cerrados, como España o, también a última hora, Italia, cuya situación empezó a empeorar hace quince días.