Las autoridades de Competencia de Portugal no ven ningún obstáculo a que la aerolínea lusa sea controlada de manera conjunta por el Estado luso y la compañía Gateway. “No se puede crear barreras significativas a la competencia efectiva en los mercados relevantes identificados” en los que opera la compañía, señala el organismo.
Competencia concluye así que el reparto de acciones "no es susceptible de crear obstáculos significativos a la competencia" dentro de ese mercado. Previamente, las autoridades de Brasil, país en el que TAP está presente, ya habían bendecido la operación, que se espera esté cerrada de manera definitiva en septiembre.
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