El veto que plantean cuatro controladores de Mallorca ha puesto en peligro el pacto global que se estaba negociando con la Fiscalía para 82 trabajadores de las torres acusados de sedición por la huelga ilegal y salvaje del puente de la Constitución de 2010. Rechazan el acuerdo porque sostienen que son inocentes y no están dispuestos a que en su hoja de servicios aparezca una condena por un delito que entienden que no han cometido, informa Diario de Mallorca este viernes (Siguen imputados 84 controladores de Baleares) (La Fiscalía ofrece a controladores aceptar su culpa).
La postura de estos cuatro imputados ha indignado al resto de compañeros, que afrontan una grave acusación por sedición como consecuencia del caos aéreo provocado en diciembre de 2010, al ir abandonado paulatinamente sus respectivos puestos de trabajo. Esta huelga encubierta, que se desarrolló en todos los aeropuertos del país, obligó al Gobierno a ordenar el cierre del espacio aéreo. Solo operaron vuelos de emergencia y el Ejecutivo tomó la drástica decisión de militarizar este servicio público, una medida que se mantuvo hasta que se normalizó la situación.
La postura de estos cuatro controladores está dificultando la negociación que algunos abogados están manteniendo desde hace meses con la Fiscalía de Baleares. La acusación ha anunciado a los abogados que solo aceptaría un acuerdo que contemple a los 82 controladores que han sido procesados. Si no es así, el pacto no se firmará y la Fiscalía mantendrá la acusación de sedición, que se castiga con penas de ingreso en prisión y la automática inhabilitación de los acusados.
En cambio, si los 82 controladores apoyaran el acuerdo, la Fiscalía retiraría el delito de sedición y lo sustituiría por el de abandono del puesto de trabajo, que se castiga únicamente con pena de multa. Se trataría del mismo delito por el que se condenará al colectivo de controladores de Madrid, que ya han alcanzado un acuerdo después de pagar una media de mil euros por cada uno de los viajes que se vieron perjudicados por esta movilización laboral. Los pagos, que alcanzarán los 15 millones de euros, los ha asumido el sindicato USCA.
Los otros abogados de Palma que representan a otros controladores están pendientes de los acontecimientos, antes de presentar los escritos de defensa. Todos son partidarios de alcanzar un acuerdo, sobre todo para evitar un macrojuicio que duraría meses, en el que sus clientes se jugarían la posibilidad de terminar en prisión.
Estan en su derecho.
En el mundo existen muchos espacios aereos donde no se presta servicio de control y no por ello estan cerrados al trafico.
Los controladores dejaron de prestar el servicio de control pero el espacio aereo lo cerro otro.
Blanco y en botella.
Lo hemos visto en las películas muchas veces. O confiesas un crimen que no has cometido y te meto en la cárcel 20 años que se quedarán en 12 probablemente, o si no confiesas, te acuso de asesinato y te pido la silla eléctrica.
¿Y eso es LEGAL es España? Si eres de los Fiscales o Jueces, te descargas de un montón de trabajo, pero si eres de los inocentes te hace una gracia que no veas.
El Trabajador que cumple su jornada anual y tope de horas extras y no se presenta a trabajar no está abandonando puesto de trabajo alguno. Es la empresa la que está delinquiendo obligándolo a trabajar más de su jornada y del tope legal de horas extras. Pero como Pepiño les llamó privilegiados y Rubalcaba les pinchó los teléfonos, aquí todo vale.
Así resolvió el partido de los descamisados un conflicto laboral. Decretando el estado de emergencia y la guardia civil yendo a domicilios a obligar a ir a trabajar.
Los únicos con orgullo y honestidad, bravo por ellos. Y eso de que "indigna" a los compañeros, mentira. Que salgan los verdaderos culpables y sean ellos los que paguen por ello.
El hecho de que la fiscalia quiera que o todos o ninguno vaya a juicio ya hace dudar. ¿no tienen derecho estos cuatro a ir a juicio aunque los demas acepten la "culpabilidad"? Esto huele muy muy mal. Yo creo que la fiscalia no quiere ni verse en juicio, no sea que se apunte hacia otro lado, hacia los verdaderos culpables.