Misterio tras el accidente mortal de un Boeing 737 español de Swiftair en Lituania. Las autoridades alemanas, país desde el que partió el avión, están investigando una sucesión de incendios en paquetes que había almacenados en los depósitos de DHL, de donde procedía la carga que llevaba. Estos incendios han tenido lugar en las últimas semanas en Leipzig, desde donde había partido (Se estrella un Boeing 737 de la aerolínea española Swiftair).
Varias fuentes relacionan este accidente con la destrucción de dos cables de fibra óptima en el Mar Báltico, que han desatado una cierta histeria.
“Con nuestras contrapartes lituana y española, debemos preguntarnos si este fue un accidente o si se trata de un hecho oscuro, propio de los tiempos volátiles en los que vivimos”, ha dicho nada menos que la ministra de Asuntos Exteriores alemana, Annalena Baerbock, en una intervención desde todo punto de vista inusual.
No obstante, nadie asegura que haya habido sabotaje ni ha emergido prueba alguna. Pero el clima es de misterio. Ha intervenido Darius Jauniskis, el jefe del espionaje lituano, quien reconoce que “no podemos descartar el terrorismo”.
El accidente o atentado se ha producido sin comunicación alguna de los pilotos. Ahora hay que ver qué dicen las cajas negras.
No se ha revelado el nombre, pero el fallecido es español, mientras que los heridos son uno español, uno alemán y uno lituano.
En Gran Bretaña la policía investiga si un incendio en unos paquetes en un almacén de Birmingham pudo estar vinculado con estos hechos.