La Unión Europea trabaja a marchas forzadas para tener listo el pasaporte de vacunación antes del arranque de la temporada de verano. Aunque los estados miembros tendrán la última palabra para decidir si siguen imponiendo restricciones de entrada a los turistas internacionales, lo que podría dar al traste con el plan inicial para reactivar los flujos turísticos, la Unión Europea continúa apostando decididamente por el proyecto (Pasaporte de vacunación: nuevo fracaso de la UE para salvar el verano turístico).
Tras la reciente votación en el Parlamento Europeo, que ha traído consigo la introducción de cambios en el texto de la Comisión Europea, se inicia ahora una negociación a tres bandas para salvar el verano. Estos dos organismos, junto con el Consejo Europeo (formado por los dirigentes de los Estados miembros), intentarán sellar un acuerdo para lanzar el pasaporte.
De momento, los cambios introducidos en el proyecto son los siguientes:
Se ha acordado un nuevo nombre, “Certificado EU COVID-19”, en vez de “Certificado Verde Digital”. Con ello se pretende que sea más claro para los ciudadanos de la Unión Europea.
El pasaporte Covid-19 deberá ir acompañado de pruebas gratuitas y accesibles, algo absolutamente clave para la lucha contra la pandemia. Y es que con un coste de hasta 150 euros, los PCR suponen una barrera casi insalvable para viajar, especialmente para las familias (Europa quiere certificados verdes y PCR gratis para viajar).
Por último, se exige igualdad total entre los viajeros vacunados y los que presenten prueba negativa. Asimismo, el Parlamento Europeo presiona para que no se impongan medidas adicionales, como cuarentenas o pruebas, a los turistas que presenten el Certificado Covid-19 de la UE. Si bien, como ya se ha mencionado, cada Estado miembro tendrá libertad para imponer las medidas que considere oportuno.
Los grandes lobbies presionan a las autoridades europeas
En un comunicado conjunto firmado por los grandes lobbies turísticos de Europa (ECTAA, HOTREC, IATA y CLIA, entre otros), se advierte a las autoridades europeas de la necesidad de que el certificado sanitario sea una realidad en cuestión de semanas. En concreto, les urgen a llegar a un acuerdo a mediados de mayo para que la implementación completa pueda tener lugar en junio (El pasaporte sanitario estará activo este mismo verano).
Inciden en que el pasaporte de vacunación "es una herramienta esencial para facilitar la libre circulación de personas dentro de la UE y reabrir los viajes de una manera segura y responsable mediante la flexibilización y, en última instancia, el levantamiento de las restricciones actuales". "Esto no es un privilegio, es un derecho incluido en los tratados europeos. El restablecimiento rápido y seguro de la libre circulación es posible y de vital importancia no solo para los turistas, sino también para los trabajadores y ciudadanos transfronterizos", recalcan.
Además, hacen hincapié en que las campañas de vacunación continúan acelerándose en toda Europa, alcanzándose ya un porcentaje del 26,5% de los ciudadanos con al menos una dosis, en comparación con el 16% de hace cuatro semanas.
SICARIOS!!
No pueden ser más demagogos, y lo son porque los trabajadores transfronterizos en ningún país con las restricciones más duras como la que hubo en toda Europa como el cierre de Alemania, Austria, Hungria, Francia Eslovaquia o nuestros vecinos Portugal, los trabajadores transfronterizos han podido cruzar sin PCR ni antígenos ni vacunas, aparte claro está que no vuelan al menos en avión, por lo tanto una falacia como la copa de un pino, otra cosa es que defiendan sus intereses con todas las presiones habidas y por haber como las ha habido en el último año.
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