El Prat, Alicante y Valencia, cerca del colapso sin ampliación a la vista

Los aeropuertos de El Prat, Alicante-Elche y Valencia continúan acercándose al límite de su capacidad mientras los gobiernos de cada región siguen sin un plan firme de ampliación de sus instalaciones. Los tres llevan meses acumulando cifras récord de pasajeros, lo que, tal y como vienen avisando algunos actores de la industria aérea, puede derivar en un colapso en breve (El aeropuerto de Valencia se acerca peligrosamente al colapso).

Según los últimos datos de Aena, entre enero y septiembre de 2024, el aeropuerto catalán atendió a 41,9 millones de pasajeros, un incremento notable respecto a los 37,6 millones del mismo periodo en 2023. Sólo en septiembre creció un 10,3%, superando los cinco millones de usuarios (Cataluña acelera la ampliación de El Prat para evitar un colapso).

A pesar de estos datos, su ampliación sigue estancada tras cerca de una decena de propuestas fallidas. Hace alrededor de un mes, Salvador Illa manifestó su intención de acelerar los trabajos para tener un plan firme a principios de 2025, pero se encontró con el bloqueo del bando independentista, que aseguró que tumbaría cualquier intento de expansión.

En la misma línea, el aeropuerto de Alicante-Elche alcanzó los 14 millones de pasajeros en los primeros nueve meses de 2024, frente a los 12 millones registrados en 2023. Este aumento del 17% se traduce en que, en apenas nueve meses, ya ha recibido más clientes que en todo el año 2022. Además, en septiembre, el número ha sido superior al de agosto de 2023, mes que tradicionalmente tiene una mayor demanda.

Así, la infraestructura actual está llegando a su límite, y los planes de ampliación, tan necesarios, siguen siendo inciertos y sin fechas concretas. La pretensión de Aena es arrancar la licitación del proyecto de ampliación durante el último trimestre de este mismo año, destinando 600 millones. Sin embargo, aún no hay nada oficial.

Finalmente, el aeropuerto de Valencia es el que está en mayor riesgo de colapso. Entre enero y septiembre, ha visto pasar por sus instalaciones a 8,3 millones de pasajeros en 2024, superando los 7,5 millones del año anterior. A falta de sumar los datos de octubre, noviembre y diciembre, todo apunta a que superará el límite de capacidad, fijado en 10,5 millones anuales.

En este caso, su fase de licitación no arrancará hasta que finalice la de Alicante-Elche, y no se plasmará hasta el DORA 2027/2021. Pese a ser considerada una inversión “prioritaria” para el gestor aeroportuario, los detalles hasta la fecha son minúsculos. Únicamente se ha indicado que la intención es acometer una “ampliación de las terminales” para “cubrir la futura demanda”, y contribuir a su “crecimiento sostenible”.