La atención de los expertos está en el C909, el avión exclusivamente chino que pretende competir con el 737 y el A320. Pero, en la trastienda, con más problemas, se ha ido desarrollando el C929, un avión de cuerpo ancho, mitad chino, mitad ruso, que pretende competir con el A350 o el B777. O sea, una aventura mucho más seria (El rival chino de Airbus y Boeing tendrá tecnología española).
El avión está listo para iniciar el complicado proceso de certificación. El primer vuelo comercial tenía que operar en 2023 y tendrá un retraso de dos años, lo cual no es nada importante si al final hay éxito. Los problemas, sin embargo, son muchos. Incluso ahora.
El gran problema hoy del avión son los motores. O la ausencia de motores. Simplemente no hay motores ni rusos ni chinos para hacer volar un avión como este. Y la tensión entre Occidente y Oriente ha llegado a niveles que no parecen permitir una trasferencia de tecnología. China y Rusia querían fabricar un motor, el CJ-2000 en Ucrania, pero es evidente que ahí las cosas aún están peor y todo ha quedado en la nada.
Para 2025, Rusia espera tener disponible el PD35, un motor adecuado para ser producido desde 2028, un poco tarde para este avión. De modo que ahora todo el proyecto descansa en un permiso estadounidense para el uso de motores Rolls Royce o GE, cosa poco probable.
El problema del motor se complica porque el PD35 sólo podría hoy desarrollarse para un modelo del C929 de 230 pasajeros, que al fin y al cabo equivale a un A321, y no para la de 280, que es donde se supone hay más mercado y, menos aún, para la de 320. La decisión sobre los motores está arrastrándose y con ella el posible éxito del proyecto conjunto.
There are no motirs for Russian planes... It's very good News! Slava UKRAINE!!
Fuck the Russians and fuck the Chinese