La negociación de Air Europa con la representación mayoritaria de los pilotos por el IV convenio colectivo mantiene actualmente un perfil bajo por la negativa de la compañía a aceptar media decena de exigencias del Sepla. Esta cerrazón deja el futuro de la negociación, de facto, en manos del Tribunal Supremo, del que se espera próximamente una sentencia definitiva sobre el anterior convenio, que la Audiencia Nacional consideró vigente hasta la firma de uno nuevo (La Audiencia Nacional obliga a Air Europa a aplicar el convenio de pilotos). El fallo, no obstante, se está demorando más de lo previsto.
Entre las reclamaciones de Sepla a la aerolínea de Globalia figuran la paralización de la externalización de vuelos a Air Europa Express, la mejora de la programación de los pilotos, la revisión de las sanciones a miembros del colectivo, la devolución de los niveles congelados y las progresiones, así como la información a los representantes de los trabajadores.
El Sepla asegura que, por su parte, la negociación sigue abierta y que se mantiene el calendario de reuniones previstas para este mes de noviembre, a pesar de que el otro sindicato, UPPA, ve bloqueado el proceso por la postura de sus colegas.
La Unión Profesional de Pilotos de Aerolínea es partidaria de firmar el acuerdo antes de que el Supremo se pronuncie mientras que, si no hay cesión de la dirección de la línea aérea, el sindicato más veterano aguardará a la sentencia judicial, que puede marcar las líneas a seguir y facilitar un entendimiento.
Ambas organizaciones sindicales estuvieron inicialmente de acuerdo en las reivindicaciones a la empresa. El Sepla ha fijado en el 30 de noviembre el límite para llamar de nuevo a la huelga si no se materializan las condiciones puestas negro sobre blanco para desconvocar la de este verano (30N: límite del Sepla a Air Europa para evitar otra huelga por la Express).
Son muchas las cosas que nos explican porque aquí va a pasar pronto lo que acontece allí, en la Nueva América de Trump: Hastío de la corrupcion, Justicia parcial e inoperante subordinada al Partido ( Murió Montesquieu), desencanto de la clase trabajadora. El Populismo no entrará hasta la cocina si lo que queda de clase media le cierra el paso, pero viendo lo que está pasando, les dejaran entrar hasta bien dentro, para que ventilen la casa y vengan aires nuevos, mejores o peores, da igual ,aires nuevos. Luego es tarde para lamentarse, es muy fácil llamar Talibán a una persona con la que nunca has querido negociar o tenderle un puente. Esperaremos, es cuestión de tiempo ver cómo se lo cargan todo y luego lloran por perder lo que han roto.
La justicia juega para la compañía. Con tanta sorpresa últimamente (brexit, trump, etc) no vaya a ser cosa q la sentencia no salga favorable.