Emirates, una de las aerolíneas más grandes del mundo, anunció este domingo que prácticamente deja de volar, excepto un puñado de operaciones menores. Al mismo tiempo, indicó que va a recortar los salarios de su plantilla hasta un máximo de la mitad. Obviamente, la crisis se atribuye al impacto del coronavirus.
Durante toda la tarde de este domingo hubo diversas versiones sobre la intensidad del recorte de las operaciones y las rutas. Inicialmente se dijo que desde este miércoles no habrá vuelo alguno. Al final, parece que unas 120 rutas van a quedar sin servicio, de las 159 que atiende la compañía, mientras que en las restantes, sólo en trece países, se operará un servicio mínimo para la repatriación de viajeros que no se encuentren en el destino que deseaban.
Emirates es propiedad del Gobierno del Dubai, uno de los emiratos árabes del golfo Pérsico.
La paralización de los vuelos de Emirates es la confirmación de la escala mundial del impacto de la epidemia de coronavirus, que empezara en China, se extendiera por Europa y ahora amenaza al resto del mundo.
Los vuelos de carga siguen operando.
Emirates tiene cien mil empleados, de los que cuatro mil son pilotos y más de veinte mil es personal de cabina. El resto son personal comercial, de mantenimiento, de servicios en tierra y de administración.
Emirates, si no estoy equivocado, no es el del Gobierno de Dubai, vamos, de los Emiratos ärabes Unidos, si no que es una empresa privada, y por eso, como es privada, los EAU crearon , esta vez si, con dinero público, Etihad, con sede en Abu Dhabi, a diferencia de Emirates que tiene su sede en Dubai. Resumiendo que Emirates es privada y Etihad es pública, ambas, como todo el mundo sabe de los Emiratos Arabes Unidos (UAE).