La oleada de cancelaciones que golpeó a Emirates la semana pasada por las intensas tormentas en el aeropuerto de Dubái podría tener consecuencias. Wings to Claim apunta que hasta 400 vuelos fueron cancelados, generando una cascada de problemas logísticos que derivó en incidentes con hasta 30.000 maletas.
En este sentido, el grupo de abogados experimentado en el sector aéreo apunta que “será reclamable cualquier equipaje que haya sido perdido, es decir, no entregado tras 21 días desde la fecha de la entrega prevista”.
En cuanto a aquellos objetos personales que sufran demoras, informa que “Emirates podrá tener una causa eximente de responsabilidad basada en la climatología”. No obstante, avisa de que “no todas las adversidades climatológicas desprenden una elusión de responsabilidad por las aerolíneas”.
En conclusión, Wings to Claim subraya que “mientras que los retrasos en la entrega de equipajes podrían eximir a las aerolíneas de responsabilidad bajo el pretexto de acontecimientos inesperados, la pérdida definitiva de equipajes no puede ampararse bajo dichas circunstancias, pues es esencial que los derechos de los pasajeros afectados también sean garantizados”.
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