El brote de coronavirus ha puesto de actualidad un artículo publicado en el National Geographic en 2018, en el que se analizaba cuáles eran los asientos más seguros en un avión para evitar o limitar los contagios en los viajes.
Partiendo de la base de que los pasajeros se mueven frecuentemente, sobre todo en trayectos largos, el estudio asegura que los asientos de ventanilla son los que menos se levantan y, por tanto, menos contacto tienen con el resto, una media de 12 frente a los 58 y 64 contactos respectivos para los pasajeros en los asientos del medio y del pasillo, lo que implica una disminución de la probabilidad de entrar en contacto con una enfermedad infecciosa, ahora bien, las posibilidades de transmisión dentro de la fila de la persona infectada son muy altas, según publica el diario LR.
En el caso de la tripulación, la situación es muy diferente, ya que cada enfermo puede infectar a 4,6 pasajeros, por lo que es necesario que no vuelen hasta que se recuperen.
Se imaginan que ahora los aerolíneas solo venden los asientos de ventanilla y el resto queda vacío?
Lo mejor para todos es que antes de embarcar se desinfecte todos los aviones y vuelos así hay menos posibilidades de contagió...vamos que la solución es bien sencilla....otra cosa es que se lleve a cabo.