Otra vez, el aeropuerto de Schiphol, en Ámsterdam, volvió a pedir el jueves pasado un nuevo recorte en el número de pasajeros, ahora hasta abril, porque dice que no tiene suficiente personal para los meses de invierno. Es lo que viene diciendo todo el verano, pero la diferencia es que esta vez le han respondido tanto KLM, la primera aerolínea del aeropuerto, como las asociaciones de agencias de viajes, diciendo que ya no aguantan más. Si se cumplen las restricciones hasta abril, habrá pasado un año con el aeropuerto incapaz de operar normalmente, como antes de la pandemia (KLM cancela otros 42 vuelos en Ámsterdam).
KLM ha advertido que el daño que le está causando este desastre interminable es ya de cien millones de euros. El caos afecta a la plantilla, que no puede desplazarse a otros aeropuertos. La aerolínea protesta especialmente porque, a diferencia de otros países, en Holanda casi no hay más aeropuertos. Eindhoven y Rotterdam, los únicos de importancia, están muy lejos y son minúsculos en comparación, y esto impide a la aerolínea compensar sus rutas desde otras bases.
Esto ha obligado a KLM a ser más dura. "El aeropuerto de Schiphol tiene que poner orden en su casa", señaló Marja Rintel, la directora de KLM. El sindicato FNV piensa que un complemento económico a los trabajadores puede ayudar a normalizar la situación (Schiphol pagará 350 euros por viajero que no vuele).
Las agencias de viajes están enfadadísimas con las nuevas restricciones también para el invierno. "Para nosotros, la temporada de deportes de invierno es clave y la vamos a perder por este caos", lamentó Frank Oostdam, el director de la patronal. También exigió que el Gobierno intervenga. "No puede ser que tengamos restricciones ahora hasta abril y el gobierno no haga nada."
Los sindicatos del aeropuerto reconocen que la situación que se anuncia es muy perjudicial. Sin embargo, añaden que los trabajadores necesitan estas medidas para aliviar la carga de trabajo. Según los sindicatos, el aeropuerto necesita "cientos" de trabajadores adicionales para recuperar la normalidad. Añaden que el caos es tal que hay hasta 20 diferentes horarios de turnos en los controles de seguridad.
Rotterdam..., ¿muy lejos de Schipol?, son alrededor de unos 50 km, conectados ambos lugares por trenes cada muy poco tiempo casi las 24 horas, otra cosa es que el aeropuerto de Rotterdam no tenga comparación con Schipol. Vamos, hay ciudades que tienen sus aeropuertos incluso a más distancia, o parecida, se me ocurre por ejemplo los de Malpensa, en Milán, o el de Narita en Tokio, o el de KUala Lumpur, o el Dulles de Washington, o el de Arlanda en Estocolmo, o el de Munich solo por citar algunos.
¿Pero y qué más daría?. El problema es la inoperancia del gobierno holandés. No importa si tienen dos , seis o veinte aeropuertos, lo que han demostrado es que son unos inútiles ante este tipo de adversidades y que no son capaces de solucionarlo en un tiempo razonable. Lo que ocurre es que al depender de cargos públicos no existe ningún tipo de responsabilidad. Es el día a día de las administraciones europeas y de las nacionales, ineptos gestores al mando de algo para lo que valen y sin ningún tipo de penalización y responsabilidad.
Que sepas que el aeropuerto de Schiphol lo lleva una empresa privada.
Europistan.
Claro si no te pilla la huelga de transporte como a mí que me costó 150 € el taxi. Pura vergüenza les tenía que dar llevar un año asi es el único aeropuerto del mundo que sigue con esos problemas