Iberia apuesta fuerte por Portugal. A partir del 1 de mayo, la aerolínea comenzará a operar sus rutas de verano con el país vecino, poniendo a disposición de sus clientes un 9% más de capacidad que en el mismo periodo de 2019 (Iberia se vuelca con el verano y llega al 85% de capacidad).
A los vuelos habituales desde Madrid a Lisboa y Oporto, se suman Funchal en mayo y Faro y Azores en junio. Estos cinco destinos tendrán una buena conectividad con la red de más de 100 rutas internacionales de la compañía en Europa, Estados Unidos y América Latina.
En mayo, Iberia ofrecerá 67 frecuencias semanales por sentido entre Madrid y Portugal, por encima de las 65 de 2019. Y en agosto, el mes con mayor tráfico, alcanzará las 76 frecuencias semanales, lo que supone un incremento del 15% respecto a 2019.
Desde el 1 de mayo hasta finales de octubre, ofrecerá vuelos directos desde Madrid a Funchal tres veces a la semana (lunes, viernes y domingo). En julio, estos vuelos se incrementarán a cinco por semana, llegando a uno diario durante agosto. Serán operados por aviones CRJ1000 de Air Nostrum con capacidad para 100 pasajeros.
El 2 de junio, Iberia estrena su segundo destino de verano en Portugal: Faro. La aerolínea empezará con tres vuelos a la semana (jueves, sábado y domingo). En julio se incrementarán a cinco y en agosto llegará hasta un vuelo diario.
La aerolínea repite este año en Ponta Delgada (Azores) con vuelos directos desde Madrid los martes y los sábados de junio a septiembre. Ha programado estos vuelos con aviones Airbus A320, con capacidad para 173 pasajeros.
Además de incorporar sus destinos de verano en Portugal, también incrementará su oferta habitual entre Madrid y Lisboa con hasta 36 vuelos semanales por sentido, frente a los 33 de 2019. Y lo mismo en la ruta Madrid y Oporto, donde contará con hasta 28 frecuencias semanales (cuatro vuelos diarios) desde mayo a octubre, frente a las 26 de 2019.
Me parece una excelente noticia que Iberia ocupe un espacio que no interesa a compañias que poco tienen que ofrecer a sus clientes.
En los últimos años, TAP, a pasado de ser una compañía de bandera que mimaba a sus clientes a una "pandereta-airlines", que experimenta cada día como sacar de quicio a esos mal llamados "clientes de alto valor" y los que no lo son.
De ser la compañía de "los brazos abiertos" ha pasado a ser la de "la caja registradora abierta", todo esto aderezado, como no, con una pésima atención al cliente y gestión de incidencias.
Iberia, sin embargo, lleva un tiempo dedicando esfuerzos a oir a sus clientes, que son los que mejor conocen junto a sus trabajadores la compañia; esperemos que no se olviden de estos últimos.
Mi deseo es que sigan ampliando destinos, Africa-portuguesa esta muy dejada de la mano de Dios y ahora que TAP, ni está ni se le espera, es un excelente momento para entrar fuerte en este mercado en profunda transformación.