JetBlue, la aerolínea americana, ha urgido al Ministerio de Transportes de Estados Unidos para que prohíba que KLM, la aerolínea holandesa, pueda seguir volando al aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York. Tan dura petición es la respuesta a la probable prohibición que Holanda aplica a la americana para su entrada en Schiphol, el aeropuerto de Ámsterdam.
Aparentemente, JetBlue podría perder sus derechos para volar a Holanda cuando el aeropuerto de la capital, el único que tiene vuelos de largo radio, reduzca el total de sus operaciones anuales. JetBlue piensa que Holanda podría entender mejor sus argumentos si Estados Unidos devuelve con la misma moneda a KLM. En una comunicación, argumenta que esa sería una respuesta “proporcionada” a lo que le espera.
JetBlue apenas empezó a volar a Ámsterdam el pasado mes de agosto. La low cost americana está empleando aviones A321 para volar a París, Londres y Ámsterdam con un nuevo tipo de servicio que no es precisamente low cost sino de alto nivel.
Pero esto colisiona con el interés de Holanda de reducir el número total de vuelos en Ámsterdam del medio millón anual actual a los 460 mil. La propia KLM, que podría ser la víctima, se opuso a este recorte porque probablemente parte de sus vuelos también sufrirán.
KLM también se juega el negocio de los vuelos ‘hub’, que son aquellos que recogen pasajeros en una interminable lista de aeropuertos pequeños y medianos de Europa para llevarlos a Ámsterdam y desde allí transportarlos a sus destinos transcontinentales.
Me parece justo y coherente
Se lo merece.