Este jueves y viernes pasados los combates en las calles de Jartum, Sudán, dieron la victoria a las fuerzas rebeldes, que tomaron el aeropuerto de la ciudad. Nadie, por supuesto, está preocupado en Occidente por Sudán. Hasta que ayer se conoció la extraña noticia, debido a un comunicado de SkyUp (Otro avión ucraniano escapa de Kiev para volar en Europa).
A ustedes les sonará SkyUp porque es la segunda aerolínea de Ucrania. Había retirado los aviones de su país antes de la invasión rusa, de forma que únicamente le quedó en Kiev un aparato que estos días huyó a Rumanía, sano y salvo. La aerolínea se ha mostrado extremadamente nacionalista y ha mantenido su actividad económica subcontratando sus aeronaves con otras empresas, entre ellas al menos Air Baltic.
Este sábado emitió un sorprendente comunicado que reconoce que la rebelión de Sudán le pilló dos aviones en el aeropuerto de Jartum, que estaban allí huyendo de Ucrania pero generando dinero con un contrato. Por lo que se ha sabido, hay 36 empleados viviendo en Jartum, varios de ellos tripulantes. Al parecer ellos no corren peligro (Huida masiva de aerolíneas de Ucrania por el posible conflicto bélico).
Los aviones, según dijo SkyUp, están contratados por Sun Air, una línea aérea sudanesa, desde el inicio de este año. Al parecer son dos unidades que han sido alquilados con tripulantes, en régimen ACMI. Operan a El Cairo, Riyad, y Jedah, en Egipto y Arabia Saudita. SkyUp ha admitido que no sabe sobre el estado de los aparatos, si bien en al menos en uno de ellos el trasmisor de emergencia está funcionando.
Uno de los 737-800 que tiene la aerolínea, el UR-SQH fue destruido ayer.
Es el karma