La historia de la crisis de Easyjet

Easyjet es un manicomio. Afortunadamente, todos los que mandan en la compañía tienen un mismo criterio, pero en la Junta de Accionistas tienen un personaje que amenaza constantemente con poner todo patas arriba. Es el propietario de más del 30 por ciento de las acciones, y es el fundador de la compañía, Stelios Haji-Ioannou. Stelios, como lo conoce todo el mundo, es el propietario de la marca Easyjet, que ha alquilado a la compañía que lleva el nombre. Pero sobre todo, es propietario de una parte importante del capital.

Stelios lleva años amargando la vida de los directivos, de forma que ha conseguido que el resto de los accionistas hagan piña. Así, su clamor no lo escucha nadie. Pero fastidia, porque es Stelios. Ya en su momento, a Caroline McCall, la anterior directora general, le dijo que estaba hundiendo la compañía, que desde esa fecha presentó los mejores resultados de su historia. 

Ahora, desde hace unas semanas, se ha empeñado en que la compañía tiene que cancelar un contrato de compra de aviones con Airbus. Ayer por la mañana, toda la prensa publicaba que “Easyjet se va a quedar sin dinero en agosto”, intentando demostrar que la compañía está fatal. Francamente, quienes sabemos cómo está la aviación, que Easyjet aguante parte de marzo, abril, mayo, junio y julio enteros sin ingresos, nos parece un indicador de salud financiera. Les aseguro que salvo Ryanair, no hay muchas más que puedan llegar a agosto tal como están las cosas hoy. Tal vez ni una.

Este lunes por la tarde, Johan Lundgren, el director general, anunciaba un acuerdo con el Tesoro británico para obtener un crédito de 600 millones, con los cuales garantizar la supervivencia de la compañía, sin cancelar sus compromisos con Airbus que, además de costarle mucho dinero en penalizaciones, podría lastrar su crecimiento futuro.

Como ven, en todas las casas cuecen habas. Pero que tu fundador sea tu primer enemigo no debe ser nada agradable.