Islas Airways facturó al Ministerio de Fomento 7,5 millones de euros más de los que le correspondían en virtud del programa de bonificaciones al transporte aéreo de residentes en Canarias. Así lo señala en una sentencia la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), informan las agencias de noticias.
En su auto, la instancia judicial ha confirmado la decisión de la Dirección General de Aviación Civil de retener cautelarmente el pago a Islas Airways de 4,44 millones de euros, así como de exigirle la devolución de algo más de 3 millones de euros.
El TSJM considera probado que la cantidad declarada ante Fomento, que es a la que se aplica el 50 por ciento de descuento por residente, era superior a la que realmente había pagado el pasajero, destinándose la diferencia “a otras finalidades distintas que no eran meramente hacer llegar al pasajero la subvención presupuestada”.
También da por bueno el proceso por el que Fomento calculó la facturación de billetes realizada por Islas Airways, ya que la compañía no le facilitó los datos, por lo que el Ejecutivo tuvo que comprar a la compañía que publica las tarifas de la mayoría de aerolíneas, ATPCO, su base de datos sobre la empresa canaria.
El proceso contra Islas Airways fue iniciado por la Fiscalía Provincial de Santa Cruz de Tenerife, que hizo así suya una denuncia del Ministerio de Fomento contra Islas Airways, de la que sospechaba que había cometido un posible delito de fraude de subvenciones.
La compañía, fundada y presidida por Miguel Concepción, se encuentra inactiva desde 2012 por la asfixia económica en que se encontraba la aerolínea, cuyos directivos culparon de la misma en buena medida a Fomento por retenerle los pagos de los billetes bonificados. El propio Concepción reconoció que su deuda podría estar entre 40 y 60 millones de euros.
A Islas Airways se la cogió como cabeza de turco para dar un aviso a otra compañía española, de mucho mayor volumen, que hacía de esta práctica algo habitual, y con la que se le ha robado a los canarios cientos de millones de euros destinados a compensar la lejanía de las islas con la península. Obviamente a esta gran compañía aún no la han multado ni tiene visos de que tal cosa vaya a ocurrir.
El único problema es el monopolio que tiene Binter y esto tiene que acabar. Un canario residente, que tenga que pagar muchas veces hasta casi cien euros por ir de una isla a otra, cuando a Madrid muchas veces pagamos la mitad, a mi que me lo expliquen.....
Ya está claro que al que intente imponerse en Canarias, será un cabeza de turco, y siempre impulsado por los mismos.