La reciente declaración de Carlos Moreno, jefe de gabinete de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ante el Tribunal Supremo, ha revelado que la trama de corrupción vinculada al exministro Ábalos y al PSOE planeaba utilizar el aeropuerto de Ciudad Real para establecer una ruta directa con Isla Margarita y Los Roques, en Venezuela (El aeropuerto de Ciudad Real, inmerso en la trama de Aldama).
Según informa Libertad Digital, este plan tenía como objetivo facilitar el tránsito de personas y mercancías entre ambos países, en una estrategia impulsada por el régimen de Nicolás Maduro. Las investigaciones revelan que estas gestiones formaban parte de los intentos del gobierno venezolano para aumentar su influencia y negocios en España.
En este sentido, Moreno ha asegurado haber mantenido contacto con Víctor de Aldama, quien representaba los intereses del aeropuerto de Ciudad Real. Aunque ha negado que sus encuentros estuvieran relacionados con favores fiscales para las sociedades vinculadas a la trama, ha reconocido que sí giraban en torno al aeropuerto castellanomanchego, de interés estratégico para varias partes involucradas.
“El principal asunto era sobre el aeropuerto de Ciudad Real, y para el Ministerio de Transporte era muy importante”, ha explicado Moreno, añadiendo que fue Koldo García, cabecilla de la trama, quien le pidió que contactara con Aldama.
El material incautado por la Unidad Central Operativa (UCO) ha reforzado la investigación, apuntando a la deseada relación del aeropuerto de Ciudad Real con Venezuela. Además, se ha confirmado que la visita de Delcy Rodríguez, la mano derecha de Maduro, estaba relacionada con una reunión entre ella y Rafael Gómez Arribas, responsable del aeropuerto, para discutir acerca de este asunto.
El citado medio apunta que la importancia estratégica de este aeropuerto radica en que, al ser menos visible que otros, como Barajas o El Prat, podría haber funcionado como una opción alternativa para los vuelos del régimen venezolano. Además, las investigaciones también sugieren que había planes para fletar vuelos con una empresa portuguesa.
En paralelo, también se han identificado vínculos con Air Europa. La compañía de Globalia habría estado involucrada en gestiones similares que le permitieran usar el aeropuerto de Ciudad Real en sus operaciones, según se pudo extraer de las conversaciones entre Aldama y Koldo.