Las nuevas exigencias de Italia para la venta de Ita

Tantas veces estuvo abierta la recepción de ofertas para la venta de Alitalia, ahora Ita, que en toda aerolínea que se precie debe de haber una carpeta que recuerda cuando se elaboró una oferta. Hasta Ryanair llegó a postularse. Y Eframovich, el empresario que acabó con Avianca (Italia para la venta de Ita Airways a Lufthansa).

Ahora, el gobierno de Mario Draghi, que había dicho que este lunes siguiente firmaría la venta, plantea nuevas exigencias a los dos candidatos que aún compiten por Ita: MSC (con Lufthansa) y el fondo Certares (con Air France).

Ahora se les pide una tercera oferta que tiene que llegar antes de las 11.59 de la noche del 22 de agosto y que será evaluada en diez días, de manera que el primero de septiembre Ita debería ser privada (Ita Airways, en campaña electoral).

Los concursantes deben mejorar el precio. MSC y Lufthansa habían ofrecido unos 850 millones de euros y Certares y Air France, 600, pero el gobierno ahora pide más.

Segundo, el Gobierno quiere más participación, si no directamente en el capital, al menos en el Consejo de Administración. MSC ofrece que el gobierno se quede con el 20 por ciento del capital y un puesto en el Consejo; Certares ofrece hasta un 40 por ciento al Gobierno. El Gobierno quiere más voz en lo que tiene que ver con flota, inversiones y mercados.

El Gobierno quiere también influir en la decisión de quién mandará en la compañía. Certares no se cierra, pero MSC-Lufthansa no quiere ni oír hablar de que el gobierno meta baza en la gestión.

El Gobierno italiano también pregunta qué pagarán los accionistas si un día decide vender su participación y marcharse.

Como ven, no es fácil lo que pide Roma: más dinero, pero también más poder, aunque ya haya vendido todo. Afortunadamente, esta vez no ha metido ni a Correos ni a la compañía de trenes como accionista, como había hecho en la última propuesta de Mateo Renzi.