La Red de seguridad de la aviación (Aviation Safety Network) ha informado que este año ha habido 16 accidentes de avión que mataron a un total de 555 personas hasta el 27 de diciembre de 2018. Eso supone un aumento de más del 900% con respecto al año pasado, cuando solo 59 personas murieron en accidentes. Por ello ASN considera 2017 "el año más seguro de la historia, tanto por el número de accidentes fatales como por el número de muertes", publica Forbes.
Las 555 muertes en 2018 son las más altas en los últimos cinco años desde 2014, cuando murieron 692, según informa Forbes. En 2018, los accidentes de avión en Rusia, Irán y Nepal mataron a 195 personas en solo un mes, desde el 11 de febrero hasta el 12 de marzo. En otro terrible accidente, el 18 de mayo, 112 de 113 pasajeros y tripulantes murieron cuando una Cubana de Aviación 737-200 se estrelló después de despegar del Aeropuerto Internacional José Martí en La Habana, Cuba. Al igual que con los otros accidentes, la causa aparentemente no ha sido determinada oficialmente. ASN, la web que realiza un seguimiento de incidentes de aerolíneas, lo clasifica como "pérdida de control".
En el accidente del vuelo 610 de Lion Air cerca de Yakarta, Indonesia, el 29 de octubre, murieron 189 personas en un nuevo Boeing 737 MAX. Fue el accidente más mortal del año y representó más de un tercio de las muertes de aerolíneas en 2018. (Lion Air: primera denuncia contra Boeing por negligencia) (Lion Air: Boeing y la FAA emitirán alertas de seguridad para los 737 Max) (Lion Air: el accidente aéreo pone todo el foco ahora en Boeing) (Lion Air: el indicador de velocidad falló en los últimos cuatro vuelos).
Uno de los accidentes más llamativos fue el de un avión de la compañía Southwest Airlines que realizó un aterrizaje de emergencia en Filadelfia tras explotarle un motor en pleno vuelo y causó la muerte de una mujer tras ser succionada por una de las ventanillas del avión (Muere una pasajera succionada por la ventanilla de un avión).
"Con las aeronaves claramente más seguras de hoy, el aumento casi diez veces mayor de muertes de pasajeros de 2017 a 2018 no es aceptable. La industria aeronáutica, las aerolíneas y los reguladores gubernamentales deben trabajar juntos para garantizar que esta tendencia preocupante no continúe en 2019", concluye Michael Goldstein en Forbes.com.
Preferente.com Diario para profesionales del Turismo