British Airways (BA) tendrá que pagar 58,8 millones de libras (casi 72 millones de euros) a las autoridades de la Competencia británica al haber sido acusada de pactar con Virgin Atlantic (VAA) los recargos por el aumento del precio del combustible aplicados en los vuelos de largo radio.
Esta multa, que en un principio fijó la oficina de Comercio Justo británica (OFT, por sus siglas en inglés) en 212,5 millones de libras (180 millones de euros), se ha reducido hasta los 58,8 millones de libras (casi 72 millones de euros) y VAA estará exenta de pagar la sanción, según informa la propia oficina.
Así, la OFT ha concluido que entre agosto de 2004 y enero de 2006, BA y VAA coordinaron sus políticas de precios en vuelos de largo recorrido hacia y desde Reino Unido a través del intercambio de los precios y otra información comercial sensible.
"Esta decisión pone fin a esta investigación y envía un fuerte mensaje de que la coordinación de la fijación de precios a través del intercambio de información confidencial entre competidores es ilegal. La multa habría sido aún mayor, pero no ha sido así por la cooperación proporcionada por BA a través de la OFT", ha señalado el organismo.
Las investigaciones de la OFT se iniciaron a raíz de una conversación entre personal VAA y BA, durante la cual se intercambiaron información sobre propuestas de cambios en sus respectivos recargos en los vuelos de largo radio, en respuesta a las fluctuaciones de los precios del petróleo.
El pasado año, VAA acudió a la OFT y desveló su participación en estas conversaciones. De esta manera, según los términos de la política de indulgencia de la OFT, la compañía pudo apelar a la inmunidad condicional, lo que le ha permitido librarse del pago de una multa.
Por otro lado, la aerolínea británica señaló que gracias a la rápida puesta en marcha de su cooperación en la investigación con la OFT, la pena le fue reducida. Un posible acuerdo con las autoridades estadounidenses supondría el cierre de las investigaciones.
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Pues ya sabemos de dónde pretende sacar IAG el dinero para pagar la trastada de Willy: de Iberia.
Entre Guillermo el Travieso y el Rafita ya van por ciento y pico millones de pérdidas en dos únicos movimientos, ambos ilegales. Uno pacta precios saltándose la libre competencia, 72 millones de nada. El otro decide saltarse un contrato firmado con sus trabajadores y crear ilegalmente una empresa que sólo en las justificadísimas huelgas de sus trabajadores de tierra y vuelo ya van por mas de 50 millones de pérdidas. Un modelo de gestión empresarial digno del mismísimo Bernard Maddof. Si en España hubiese un gobierno serio le parararía los pies a estos tipos tal como ha hecho el gobierno finlandés con los directivos de Finnair.