Recuerdo perfectamente el estallido de un caso de corrupción en política. Ya saben: un periódico publica una sospecha, la gente se sorprende, todos los medios enloquecen, se publican páginas y páginas, las radios y la televisión no hablan de otra cosa, las cámaras persiguen a los acusados, los sospechosos no saben dónde meterse, etcétera. En eso, uno de los políticos afectados decidió cortar por lo sano: dio una rueda de prensa en la que dijo “doy por concluido el debate. No hay corrupción”, esperando inocentemente que todo quedara en agua de borrajas, que se diera el caso por acabado. Ni qué decir tiene que la realidad termina por imponerse, por mucho que a nuestro político valiente le hubiera gustado haber acabado con aquello porque lo decía él.
A los bancos en crisis, a los ministros de Hacienda cuya moneda está a punto de devaluarse, a los países en ruina, a las empresas a punto de cerrar, también les molesta la comunicación, la prensa, la imagen pública. “No hay razones para la preocupación”, dicen ante los micrófonos, en un desmentido que no convence a nadie, porque precisamente sobran razones para estar más que angustiados.
Antes una confrontación bélica, igual. ¿Se acuerdan de “la madre de todas las batallas” que iba a dar Saddam Hussein, que acabaría con todos, y que nunca tuvo lugar? ¿Y qué va a decir quien va a una guerra? Es como los boxeadores cuando se pesan ante la prensa: “Te voy a triturar” le gritan al rival, para autopersuadirse de que son los más fuertes del mundo, ocultando así que están temblando de miedo.
En este contexto es que hay que escuchar a Pepe Hidalgo, el propietario de Globalia y de Air Europa. Se dice a sí mismo, en voz alta, que va a luchar, que va a ganar, que para qué demonios necesita de Iberia o del Gobierno, que es un campeón, como si eso fuera a arreglar el enorme descosido que el Covid está causando en las cuentas de su aerolínea. ¡Qué nos iba a decir!
Pepe tiene los días contados en Air Europa y el lo sabe. Y sino se va el, los que tienen losndias contados son los trabajadores porque no va a ser fácil salir indemne de esta crisis. Antes por menos hacían un ERE y ahora me temo que es inevitable uno en junio. Que los larga hayan ido llenos en Navidad no es óbice para que ahora vayan semi vacíos, es lo de siempre, y volverán a llenarse en agosto, pero dos meses no salvan un año y la carga no siempre es negocio.
Hacer un plan dw reestructurancion, bajar los salarios nescafe de los amigos de, suprimir puestos duplicados, reducir costes en resumen, es la única salvación posible al menos por ahora.
La única solución posible era ya hace bastante tiempo…AEA es una aerolínea con una eficiencia muy por debajo de la media del sector y el COVID no ha hecho más que poner negro sobre blanco las carencias de esta cía,su pasivo es impagable con esta eficiencia,es imperativo una reducción de costes,esto significa hacer un ERE y reducir drásticamente salarios.Veremos si su máximo accionista,por el momento, es capaz de aceptar la realidad o por el contrario verá cómo su aerolínea sigue con esta agonía que la llevará a desaparición en unos meses.
La podredumbre está en toda Dinamarca,donde Copenhague es su capital.
Pepe aviones es todo un personaje,empresario hecho a si mismo con lo que tiene de bueno y de malo,acostumbrado a la españa de los 80 y su forma de hacer negocios donde la corrupción y los sobres a los políticos eran la tónica de aquella época,esas amistades de los 80 son las que le han salvado de una quiebra inminente,nuestro amigo Pepe no entiende que su tiempo ya paso y que la de su empresa tal y como estaba concebida también,su gran error fue dejar esa necesaria transformación empresarial en manos de sus vástagos,ninguno de ellos mínimamente preparados e interesados en el negocio familiar,ahí reside su error,debió aprender de otras empresas familiares que ponen la gestión en manos de profesionales alejando a sus retoños de la planta noble.
Efectivamente, es tal y como describes...Yo llevo 21 años en el grupo y después de la salida del DESPOTA SIN IGUAL de Esterminio, entramos un nuevo equipo que junto a los Fernando GR, Pilar R, Luis M, Pepe D, Richard C, Chema H, etc. etc...le dimos un vuelco tan grande que nos salía el trabajo por todos lados...ingresábamos cuentas y dinero como nunca, la Aérea, a tope de asientos ocupados, el TTOO como un tiro, creciendo y creciendo a 2 dígitos por años, y la minorista vendiendo nuestros productos...tan bien íbamos que creamos la división hotelera y la de handling...y otro cohete....El Presi, estaba encantado con nosotros y nosotros con él...Pero llego la hora de salidas y despidos...primero Pepe D, se fué de Presidente a otra empresa y el viejo se asustó ya que era el único que mantenía al caprichoso de su hijo en su sitio y a raya, pero sucumbió y el hijo pasó a jugar a Director General del Grupo y no dejó títere con cabeza...amiguetes, pelotillas, impresentables, incompetentes...han sido los que se han cargado en 10 años una estructura empresarial y con 40 años de antiguedad, trabajo y sacrificios...del Presi y de toda la directiva y plantilla....y guste o no, esta es la realidad. Sr. Hidalgo, todavía hoy, mi Presi, se equivocó y no aprendió de otros empresarios que SI supieron realizar un cambio generacional y exitoso. ahí están ellos y vamos a ver donde acabamos nosotros...y CUANDO.
En esa imagen sólo se ve un cadáver, un cadáver empresarial poco más.
Descanse en Paz. Mis condolencias a la familia del transporte aéreo.
Iberia es un troyano que han metido en AEA para destrozarla.
¿Alguien recuerda de dónde salió Air Europa....?, ¿alguien recuerda aAir Europe, y como estaba a punto de desaparecer,,,?, q ahí aparecó Pepe, pues eso. La historia se repite. Vamos, que AEA, no nació de la nada.
Pero Pepe tenia 40 años menos.