Los precios de los billetes de avión descendieron en el año 2023. Pese a la sensación de encarecimiento general, el INE ha informado de que las aerolíneas que operan en España bajaron, de media, un 1,7% las tarifas por primera vez en dos años. (Así evolucionarán los precios de los billetes de avión en 2024)
Según la información recogida por Europa Press, en los vuelos hacia el extranjero, la bajada fue de apenas un 0,9%, mientras que en los de ámbito nacional fue más notable (-2,5%). Se rompe así con dos años consecutivos de incrementos, ya que, en 2021, las tarifas subieron un 0,2% y, en 2022, un 5,1% debido a los efectos de la pandemia y el impacto de la inflación. (IATA defiende la subida de precios de las aerolíneas)
Por meses, julio fue el que consiguió romper con la tendencia al alza de los precios de las aerolíneas, experimentando un descenso del 1,2%. Tras ello, hubo tres meses de crecimiento, pero volvió a mitigarse con un nuevo descenso de alrededor de un 5% en noviembre, y de un 3,3% de media en diciembre.
En la otra cara de la moneda se encuentran los hoteles, hostales, pensiones y servicios de alojamiento, cuyos precios se han encarecido un 7,8% en un año. El crecimiento es ligeramente inferior a la de 2022, cuando la subida fue de un 11,8%.
Por su parte, los paquetes turísticos han sido los que mayor incremento han experimentado con unas tarifas un 18% más caras. Este porcentaje corresponde a los de ámbito nacional, ya que los internacionales se mantuvieron estables (+0,1%).
Una cosa está clara, y es que todos están sacando tajada de la coyuntura, y no solo el sector turístico que en `particular se les ha ido la mano, pero ya se sabe que lo que sube luego nunca baja. Y además nos hacemos trampas al solitario, ese año baja la inflación, en otras palabras sube un 6%, por ejemplo, sobre un, pongamos, un 30% el año pasado, La conclusión es que lo que hace dos años costaba 100, hoy vale 140, mientras que los sueldos que eran 100, hoy son 110 ó 115 en el mejor de los casos. En conclusión, que los que tenemos una nómina o pensión somos mucho más pobres, mientras una minoría son cada vez más ricos. Lo demás es distraer la atención.