La crisis del Covid-19 ha arrasado con la industria aérea, haciendo que se tambaleen los cimientos de todas y cada una de las compañías aéreas. Aunque todo apunta a que en la recta final de 2021 se iniciará la ansiada recuperación, harán falta varios años para volver a los niveles previos a la pandemia y, además, las aerolíneas de todo el mundo arrastrarán unos niveles de deuda históricos (La IATA advierte: la crisis durará al menos hasta 2025).
Pese a la drástica reducción de costes aplicada desde el inicio de la pandemia, las empresas de este sector, con independencia de su tamaño o exposición, se han visto obligadas a recurrir a rescates estatales, créditos y aplazamientos del vencimiento de la deuda. Según los datos recabados por la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), su nivel de endeudamiento se ha triplicado en un año, pasando de 220.000 a 651.000 millones de dólares (Lista de rescates estatales impugnados por Ryanair ante los tribunales).
El director general del lobby aéreo, Willie Walsh, explica que algunas líneas aéreas, gracias a la combinación de la ayuda estatal, la reducción de costes y el acceso a los mercados de capital, "parecen capaces de capear la tormenta" sin recurrir a medidas adicionales de financiación. Sin embargo, advierte que "otras están menos protegidas y es posible que precisen de más efectivos de los bancos o los mercados".
IATA calcula que la industria de la aviación cerrará 2021 con una pérdida neta de 47.700 millones de dólares, un balance alarmante pese a aminorarse el desplome de 2020, cuando perdieron 126.400 millones. Además, quemarán efectivo por importe de 81.000 millones de dólares, cantidad que se suma a los 149.000 millones de 2020.
Estos datos vienen a demostrar que "la industria necesitará más medidas de ayuda de los gobiernos, especialmente en forma de programas de apoyo al empleo", sostiene IATA. "Esta crisis es más larga y profunda de lo que cualquiera podría haber esperado. Las pérdidas se reducirán, pero el dolor de la crisis aumenta", lamenta Walsh.
Un 5,5 % en cinco años?, por dios que todas van a desaparecer como consecuencia de esa supuesta subida,¡seamos serios!, otra cosa es que sea oportuna y eso ya es más discutible, pero si ese fuera el problema de las aerolíneas otro gallo les cantaría.
Y más preocupa el bajo nivel de ventas. Este año van a caer compañías como moscas.