La aerolínea estatal de Malta, KM Malta, aún no lleva una semana volando y ya tiene un lío monumental: su dirección decidió suprimir la exigencia de la lengua maltesa para el personal de la compañía, aduciendo que el ochenta por ciento de los clientes no son locales y que, en todo caso, los locales también hablan inglés. De modo que los empleados ahora ya no tienen que cumplir este requisito (Hoy desaparece Air Malta y la reemplaza KM Malta).
En España podemos entender perfectamente la que se armó.
La dirección de la nueva aerolínea explicó que todos los empleados procedentes de Air Malta hablan maltés, y que en los aviones se seguirán empleando grabaciones en los dos idiomas. “Con un personal de cuatro o cinco personas por avión, siempre habrá alguien que tenga un buen dominio del maltés. Pero en muchas rutas premiaremos la cualificación profesional”, dijo un portavoz de la compañía.
El Nationalist Party de Malta criticó la decisión calificándola de “vergüenza”. Los diputados de la oposición se lanzaron en tromba contra la decisión de la compañía y acusaron al gobierno laborista de despreciar la lengua local.
Malta Air, propiedad de Ryanair, parece que tiene asegurado su éxito, mientras su rival estatal se pelea por el uso del idioma.
Albricias.!!! No estamos solos.
NOTAM a los que pregonan: “esto sólo pasa en España”.
La vieja EU no es un crisol de culturas y pueblos por casualidad.