Qatar recupera sus rutas aéreas sobre Arabia Saudita

Era 2017 cuando, de pronto, inesperadamente, Arabia Saudita, Bahrein, los Emiratos Árabes y Egipto, rompieron relaciones diplomáticas con Qatar, expulsaron a sus ciudadanos y prohibieron a su compañía aérea volar por encima de su territorio y, por supuesto, cortaron sus operaciones. Así, desde hace más de dos años, todos los vuelos de Qatar Airways a Occidente, que son una parte fundamental, tenían un fuerte encarecimiento porque debía volar únicamente por encima del espacio aéreo de Irán que, enfrentada a Arabia, mantuvo su espacio aéreo abierto.

Qatar Airways es muy importante para nosotros porque la aerolínea con base en Doha es la propietaria del 25 por ciento de IAG, el grupo al que pertenecen tanto Iberia como Vueling. 

La suspensión de las relaciones con Arabia tenía otra consecuencia brutal: la pérdida de los vuelos de cercanías entre estos países, que eran unos 14 millones de asientos en 2016 y de los que más de ocho estaban controlados por Qatar, líder en este mercado. Las demás 15 aerolíneas se repartían el resto de la capacidad de estas rutas.

Qatar, este mismo jueves, procedió a reordenar sus rutas. Un vuelo con destino a Sudáfrica fue el primero que volvió a volar sobre la Península Arábiga, acabando el costoso rodeo a que estaba obligada. En los próximos días, la compañía hará que su base de Doha esté mejor conectada con el mundo.

Dado el oscurantismo de estas compañías, no es posible saber con precisión cuántas pérdidas se generaron. Tampoco es posible saber con precisión qué ha cambiado las cosas para que, de pronto, todo se normalizara. La cuestión es que, desde ayer, si el virus le permite viajar al Golfo Pérsico, ha de saber que Qatar vuelve a estar conectada con el resto del mundo de forma más simple.