Qué es Sara, el nuevo ‘invento’ de Air Nostrum

Air Nostrum y CityJet, una aerolínea irlandesa que, como la valenciana, opera en rutas de baja demanda, con aviones pequeños, acaban de crear Sara, una empresa de servicios. Las dos aerolíneas llevan cinco años en pareja: tenían una alianza en la que se han ido conociendo y han ido contratando servicios conjuntamente. No es lo mismo pedir a un proveedor servicios para un número de aviones que para el doble, por ejemplo. De eso se trata (Air Nostrum: beneficios, alianza con CityJet y paz social).

Ahora, tras el noviazgo, digamos que se han casado. Nace Sara, que es una empresa de servicios. Es decir, de mantenimiento de aviones, de formación de tripulaciones, de servicios centrales, etcétera. Sara es propiedad de Air Nostrum al 80 por ciento y de CityJet al 20. En la aventura hay una tercera y una cuarta aerolíneas: Hibernian, irlandesa también y CityJet A/S, de Dinamarca. Tanto Hibernian como la danesa son filiales de CityJet, con lo que en realidad siguen siendo dos socios.

La aerolínea irlandesa CityJet se ha asociado con la española Air Nostrum y otras siete empresas para crear una nueva alianza de aviación regional.

Entre las dos compañías tienen 2.500 trabajadores, operan 74 aviones y tienen planes para ampliar flota hasta los cien. No han dicho nada, pero también Air Nostrum espera hacerse con diez zepelines para operar en el Mediterráneo.

El presidente de Sara tenía que ser Carlos Bertomeu, lógicamente, quien se ha molestado mucho en remarcar que nadie compra a nadie, para no incomodar a los irlandeses. Sólo se crea una empresa de servicios comunes. Miguel Ángel Falcón será el ejecutivo de la nueva compañía.