Ryanair acaba de anunciar tres mil despidos como consecuencia de la crisis del coronavirus. El anuncio por parte de la compañía irlandesa no especifica dónde se producirán las bajas. La empresa explica que probablemente para el 30 de junio habrá transportado 150 mil viajeros entre los meses de abril, mayo y junio el mes de abril, cuando lo normal era superar los 130 millones.
Ante esta situación, Michael O'Leary declaró a la televisión que “si tenemos que transportar tan pocos pasajeros y a los precios mínimos a lo que lo hacemos, no tenemos otro remedio que prescindir de parte de nuestra plantilla”.
Esto, dijo, supondrá despedir el 15 por ciento de los trabajadores mientras que el resto de los trabajadores tendrá recortes de salario de hasta el 20 por ciento durante los próximos doce a veinticuatro meses.
O'Leary dijo que él ya ha visto recortado su salario en 50 por ciento en los meses de abril y mayo y ahora ha decidido mantener ese recorte hasta el mes de marzo del año que viene.
Al mismo tiempo, O'Leary ratificó su decisión de impugnar ante los tribunales los rescates de las compañías nacionales por parte de los diversos estados europeos, lógicamente en contra de la legislación que prevé que no habrá ayudas públicas en una economía de mercado.
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