Lidija Miliute, de 26 años, voló el pasado 28 de marzo de 2022 en un avión de Ryanair desde Palenga, en Lituania, a Irlanda. Un tripulante de cabina del avión le sirvió un té caliente, cuando la taza se deslizó de la bandeja y se cayó encima de ella.
Los tribunales irlandeses oyeron cómo la pasajera pasó unas dos horas en estado de dolor incontenible, pese a los primeros auxilios que le dio la tripulación y una enfermera que iba a bordo, empleando el botiquín del avión.
Las quemaduras certificadas son de segundo grado. Algunas de las lesiones, como una en la muñeca ya serán de por vida. La joven lituana residente en Irlanda dijo que ella iba a ponerle leche al té, cuando la bandeja defectuosa permitió que la taza se deslizara. La chica afirma que la bandeja no estaba equilibrada y que el sobrecargo del avión al que le indicó esto le sugirió que emplearan la bandeja del asiento vecino, que estaba libre. No obstante, Ryanair niega esto. El personal asegura que no hubieran dejado a un viajero sentarse con una bandeja en mal estado.
Pese a la negativa de la compañía aérea, el juez dictamina que la joven tiene derecho a una indemnización de 55 mil euros, debido al “considerable dolor y sufrimiento” que ha tenido.