El primer avión A380 que ha sido retirado de servicio, antiguamente operado por Singapore Airlines, con matrícula 9V-SKA, se está convirtiendo en placas metálicas identificativas, recordatorias del avión al que pertenecieron. Una especie de piedra del antiguo muro de Berlín, pero en metal. El avión está siendo vendido pieza a pieza desde su 'cementerio' o retiro definitivo, en Tarbes, sureste de Francia. La empresa que lleva a cabo la comercialización de las placas del avión es Tarmac Aerosave, especialista en el reciclado de residuos industriales de grandes dimensiones.
La compañía alemana German Aviationtag ha lanzado una serie especial de 7.000 placas de identificación procedentes del avión, las cuales están disponibles en el mercado para los muy aficionados a tener un recuerdo de este avión.
“Cada placa de la edición limitada explica qué tipo de avión es, el número de registro y todos los detalles técnicos necesarios”, informa la comercializadora.
Insólitamente, el avión A380 que se está vendiendo a trozos, voló por primera vez desde el aeropuerto de Toulouse, en Francia, el 7 de mayo de 2006, hace apenas 15 años. Se entró a Singapore Airlines el 12 de octubre de 2007 y empezó a volar apenas una semana y media después. El primer vuelo comercial fue desde Changi, en Singapur, a Sydney, en Australia. El avión se retiró en 2017, apenas diez años de empezar a volar. Ese mismo día se retiró un segundo avión pero este fue comprado por la portuguesa HiFly y sigue operando en régimen de charter, aunque con muy poca intensidad por la limitación en el número de aeropuertos a los que puede volar.
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