Spanair estuvo tiempo sin pagar las tasas aeroportuarias y otros conceptos a Aena, hasta acumular una deuda de 70 millones de euros. Así se ha puesto de manifiesto estos días ante el Juzgado Mercantil número 10 de Barcelona que se encarga del concurso voluntario de acreedores de la compañía aérea, donde se está recabando información sobre lo que Spanair ha dejado a deber a cada uno de sus acreedores.
El gestor aeroportuario, con 70 millones de deuda, aparece según El Confidencial como uno de los principales afectados por la quiebra de la aerolínea catalana, después de SAS, a la que Spanair también ha dejado sin devolver un crédito de 149 millones de euros. El diario digital apunta que los datos que han trascendido revelan que el apoyo a la compañía presidida por Ferran Soriano no se limitó a la Generalitat de Cataluña, sino que también contó con el respaldo implícito del Estado.
En el caso de Aena, igual que el de Hacienda o la Seguridad Social, las posibilidades de recuperar lo adeudado por Spanair son algo mayores que para el ICF (Instituto Catalán de Finanzas), al que adeuda 60 millones de euros, o que para la escandinava SAS, pues los administradores concursales podrían considerar estos débitos como parte del capital.
No obstante, Spanair, con un pasivo de 470 millones de euros, lo tendrá difícil para devolver el dinero a cualquiera de sus acreedores. Por ahora, no puede ni hacer frente a las nóminas de sus trabajadores, que deberán cobrar del Fogasa. Este lunes comienza a negociarse el ERE en la compañía, que supondrá la extinción de más de 2.600 empleos.
Pero eso lo sabía Aena hace años. Que no sa hagan los tontos. Aena responsable con el Gobierno del cierre de Spanair y de dejar pasajeros tirados. Generalitat a la cárcel! Cómo que iban a comprar Spanair? Con semejante deuda? Directivos de pacotilla !
Tendran que reclamarselos a los accionistas y si no pagan a subastar todos sus bienes.
Ya esta bien de estafadores del dinero de todos.
Suma y sigue.
Y, ¿ No hay manera de ponerles un jefe a los políticos?
Así les aplicaría su propia reforma laboral.
Spanair estaba ya quebrada antes de que llegaran los catalanes, de hecho tenían que haber cerrado en el 2008 o antes.