TAP Portugal obtuvo unos beneficios de 3’1 millones de euros en 2011, una fuerte reducción respecto de las cifras positivas de 62’3 millones de euros logrados en 2010. La compañía aérea pública, que el Gobierno luso tiene intención de privatizar, ha justificado este descenso por el alza del precio del combustible.
En un comunicado, la aerolínea pública portuguesa ha recalcado que “TAP ha presentado beneficios por tercer año consecutivo” y ha atribuido este resultado al “número récord de pasajeros transportados en 2011 de 9’8 millones”, que representa un incremento del 7’3% en comparación con el año anterior.
La venta de TAP está sobre la mesa del gabinete del presidente Pedro Passos Coelho y es conocido el interés del consorcio IAG, integrado por Iberia y British Airways, por hacerse con la compañía, cuya flota la componen 71 aviones y opera en 65 aeropuertos.
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