Tragedia aérea en China: la opción del suicido pierde fuerza

Aunque habrá que esperar a la descodificación de las cajas negras para saber con exactitud qué provocó la caída en picado del Boeing 737-800 en China, con el paso de los días pierde fuerza la opción del suicidio (La segunda caja negra del avión chino, en buen estado).

La posibilidad de que uno de los pilotos de China Eastern hubiera actuado como lo hizo en 2015 el copiloto de Germanwings, que estrelló en los Alpes franceses un A320 con 144 personas a bordo, parece cada vez menos probable.

Dos son los motivos en los que se basan los expertos. El primero, siempre y cuando los datos recogidos por FlightRadar24 sean exactos, es que la aeronave frenó su caída en picado durante segundos, lo cual viene a demostrar que se intentó evitar el accidente (El Boeing 737 de China Eastern intentó levantar el vuelo antes de la colisión).

En concreto, tras el primer descenso, en el que el 737-800 pasó de 29.100 a 7.425 pies, el avión realizó un breve ascenso hasta alcanzar los 8.600 pies, para posteriormente volver a caer hasta chocar contra el suelo.

El segundo motivo es el perfil de los pilotos que estaban al frente de la aeronave. Al mando se encontraba Yang Hongda, de 32 años de edad, que cuatro meses antes del accidente había sido padre. Le acompañaba el primer oficial Zhang Zhengping (de 59 años), que con 32.000 horas de vuelo a sus espaldas en más de 30 años ejerciendo la profesión, se preparaba para jubilarse este mismo año.