Un Boeing 767-300ER de United, la aerolínea americana, sufrió daños graves en un aterrizaje muy violento en la pista del aeropuerto de Houston. El avión llegaba en el vuelo UA702 procedente de Newark, en Nueva York. Los hechos ocurrieron el pasado sábado.
El incidente fue reportado a la Administración Federal de Aviación (FAA) de los Estados Unidos. Una inspección encontró daños graves. Las fotos publicadas en las redes sociales muestran una curva en el fuselaje. No hubo heridos entre los pasajeros o tripulantes del avión.
El aterrizaje tuvo lugar unos minutos antes de las 11 de la mañana del sábado, cuando había un viento irrelevante en el aeropuerto.
El Boeing 767-300ER ha permanecido en tierra en Houston desde que aterrizó, como era de esperar. “El vuelo 702 de United aterrizó en Houston el sábado y todos los pasajeros desembarcaron normalmente. Estamos trabajando con la NTSB y la FAA y realizando nuestra propia investigación para comprender los detalles de este aterrizaje”, dijo un portavoz de la compañía, quien también añadió que no se espera que el avión vuele en un futuro inmediato.
No es habitual que un aterrizaje pueda provocar daños de esta magnitud, pese a lo cual hay casos. En España, el 18 de febrero de 1990, un DC9 de Aviaco que hacía la ruta entre Palma y Menorca aterrizó con mucha violencia en el aeropuerto de Mahón, pero el piloto decidió abortar la operación, reemprendió vuelo y regresó a origen donde sí tocó tierra sin problemas. Una inspección comprobó que el avión había sufrido daños de envergadura en su contacto con la pista en Menorca y había volado. Fue retirado definitivamente del servicio.
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Vaya h.ostia