Nuevamente, un pasajero conflictivo provoca el desvío de un avión, con todos los perjuicios que ello conlleva. Un Boeing 737-8 de Ryanair que cubría la ruta París Marrakech ha tenido que aterrizar de emergencia en Madrid por culpa de uno de sus viajeros.
Según se informa en la cuenta oficial de Twitter de los controladores aéreos (@controladores), el avión ha aterrizado sin complicaciones "después de realizar varias esperas para reducir peso". Las fuerzas de seguridad del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas han sido requeridas por la tripulación.
Los controladores aéreos explican que, aunque la aeronave seguramente podría haber aterrizado con el combustible que llevaban en aquel momento, los pilotos podrían haber preferido hacerlo "con menos peso". "Eso ya es cosa de la tripulación", señalan.
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