Una mujer de 39 años sufrió un ictus en un vuelo de Ryanair que volaba desde Inglaterra a Creta (Grecia) y logró salvar su vida gracias a un cúmulo de circunstancias: su hija de 6 años avisó a tiempo a la azafata que su madre se encontraba mal y un médico que iba en el avión advirtió que debían aterrizar cuanto antes por lo que el piloto no dudó en efectuar un aterrizaje de emergencia.
El avión aterrizaría en una ciudad de Italia donde trasladaron a la mujer en estado de coma a un hospital donde fue intervenida quirúrgicamente. A los diez días despertó del coma y aunque sufre secuelas: tiene las dos piernas y uno de los brazos paralizados, está muy agradecida a su hija.
“Estoy muy orgullosa de ella. Me salvó la vida a pesar de su edad”, ha asegurado la madre. La paciente estuvo un mes ingresada hasta que pudo ser repatriada a Reino Unido. Su familia tuvo que realizar una campaña de GoFundMe para pagar los gastos hospitalarios que ascendieron a 30.000 euros, ha adelantado el New York Post. Los hechos ocurrieron el pasado mes de julio pero se han difundido ahora, publica ABC.
Pobre mujer, que te dé una embolia justo en la arrancada...
Ciertamente, ha salvado la vida, y solo le deseo que la rehabilitación le evite en la medida de lo posible la parálisis de los miembros. Resultará bastante duro, pero según como le hay afectado, tal vez pueda recuperar movilidad en mayor o menor medida. Y algo que me llama la atención, si esta señora era ciudadana de la UE, ¿no tenía seguro médico?. Y aún así, ¿tampoco llevaba seguro de viaje?. Yo sufrí lo mismo que esta señora, y el seguro cubrió todos los gastos, a pesar de estar en Canada. y los gastos no fueron una minucia precisamente. Lo dicho, la mejor suerte del mundo.