Este vuelo desde Londres Heathrow a Hong Kong no es uno más. Es la prueba de que Virgin Atlantic sigue viva, después de tres meses de interrupción absoluta de sus operaciones. Y es la prueba de que ha conseguido financiación privada para sobrevivir. Virgin ha vuelto a volar, al recibir a su primer pasajero tras el coronavirus.
Richard Branson (propietario del 51 por ciento, con el 49 en manos de Delta) había pedido ayuda al Gobierno británico que se la denegó. Finalmente, inversores privados le han facilitado fondos para recuperar la normalidad, aunque con límites.
Naturalmente, este no es el final del drama, pero es el final del principio. Con las políticas que hoy por hoy están llevando a la práctica todas las aerolíneas, Virgin Atlantic, que es una compañía de largo radio, ha vuelto a volar.
El matiz de “largo radio” no es menor porque en este segmento del mercado es donde hay más problemas para recuperar la normalidad. La dispersión de exigencias sanitarias en las fronteras, la variabilidad de las normas, la duración de los viajes y el miedo de los pasajeros está causando estragos en la demanda.
Para hacerse una idea, Virgin no utiliza todos los asientos del avión, de lo que se infiere que, mientras estas medidas estén en vigor, el precio de los vuelos será más elevado.
Pero para la compañía, que estuvo a un paso de cerrar, ahora todos los esfuerzos están en volver a volar. El director de relaciones con el cliente, Corneel Koster, dijo que “queremos asegurarnos de que desde el punto de vista de la salud y la seguridad no haya problemas. Hemos trabajado para ofrecer al viajero garantías”, lo cual no garantiza que vaya a haber más pasajeros porque el miedo se ha instalado en casi todos los mercados.
Ahora mismo, Virgin ya vuela a Hong Kong, e inmediatamente reanudará sus operaciones con Nueva York (donde el virus ha remitido) y Los Ángeles. En los próximos meses se ampliará la cobertura, para intentar llegar a las navidades con la oferta habitual.
Este es buen ejemplo de lo que debería hacer Air Europa,es decir apoquinar dinero sus accionistas y menos ayudas públicas,que el dinero del contribuyente no está para salvar el culo a estos mangantes,menuda familia de sinvergüenzas.