XL Airways, otra aerolínea francesa contra las cuerdas

XL Airways Francia ha confirmado que está en negociaciones para vender la compañía porque no tiene liquidez y necesita urgentemente dinero. Tras el anuncio hace una semana de Aigle Azur y su posterior quiebra, es la segunda compañía aérea de ese país que revela su crisis. Exceptuado el grupo Air France y filiales, XL y Aigle Azur son las compañías más grandes, en un país en el que prácticamente no hay aerolíneas medianas. La compañía ha admitido que barajan dos ofertas. 

Hace pocos días, La Tribune, un periódico económico, informaba que XL necesitaba urgentemente una inyección de 20 millones de euros para llegar a final de año. Los accionistas se reunieron para estudiar la situación. El primer accionista es Dreamjet Participations. XL lleva años de dificultades, que ha dejado sus finanzas secas. Por eso se ha unido a La Compagnie, que es aún más pequeña que XL. Ahora, tras esta unión, las dos compañías tienen 40 accionistas, de los que cuatro controlan el 60 por ciento del capital. Sólo estos accionistas están dispuestos a ampliar capital, mientras el resto se niega.

La Compagnie fue fundada por Frantz Yvelin, que estaba al frente de la cerrada Aigle Azur, lo que denuncia la complicación de las estructuras financieras, en todo caso extremadamente endebles.

XL Airways opera desde Charles De Gaulle. Dispone de cuatro Airbus 330 y vuela sobre todo al Caribe francés, Dominicana y Estados Unidos. La irrupción de Level y de Norwegian en su segmento de negocio debilitó aún más su posición.