Entre enero y abril, Renfe ha logrado reducir en un 25% el importe de 200 millones de euros que tenía en facturas pendientes de cobro. En los cuatro primeros meses de 2015, la compañía ha mejorado un 61% su resultado bruto, que ha sido de 57 millones en lugar de los 35 de un año atrás. Sus ingresos también han crecido un 3%, hasta 967 millones.
El año pasado, Renfe perdió 190 millones. Su presidente, Pablo Vázquez, ha sentenciado: “No tiene sentido que tengamos miles de millones de euros en activos y que perdamos 200 millones; eso es un mal uso de los recursos”. Por ello, ha impulsado un plan con 50 medidas para lograr beneficios este ejercicio.
Vázquez se ha referido al AVE como la “actividad más rentable de Renfe” y, a su juicio, los corredores de alta velocidad multiplican “por cinco o por diez” el tráfico de las vías convencionales. “Es un centro de rentabilidad, lo que nos mantiene”, ha subrayado. Sobre la liberalización del corredor de Levante, solo ha dicho que será “un pequeño hito” en la historia española.
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