Madrid. 3/2/09.- El grupo Scandinavian Airlines Systems (SAS), que acaba de ceder el control de Spanair a un grupo de inversores catalanes, registró en 2008 pérdidas de 636 millones de euros, frente al beneficio de 60 millones alcanzado en 2007. Los resultados del grupo aparecen fuertemente lastrados por Spanair, cuyos números rojos ascendieron en 2008 a 460 millones de euros, según informa SAS en un comunicado.
SAS llevará a cabo una ampliación de capital por importe de 560 millones de euros. La operación tiene el respaldo de los gobiernos de Suecia, Dinamarca y Finlandia. Los ajustes en la aerolínea se completarán con nuevos despidos, ya que prevé recortar 8.600 empleos para ahorrar 122 millones de euros anuales.
La facturación de SAS creció el año pasado un 5,1%, hasta 1.211 millones de euros. El consejero delegado, Mats Jansson, afirma que 2008 será recordado como de los años más turbulentos y desafiantes en la industria de la aviación.
El consorcio escandinavo quiere concentrarse ahora en el mercado de Europa del Norte, en medio de fuertes rumores que apuntan a su inminente adquisición por parte de la alemana Deutsche Lufthansa.
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