737 Max: Boeing se escuda en pilotos y en los ingenieros

Boeing ha emitido un comunicado que más parece un alegato de defensa en un juicio que una comunicación empresarial. El gigante aeronáutico descarga la responsabilidad de los problemas de los 737 Max en los pilotos al asegurar que "la alerta de desacuerdo del ángulo de ataque, conocida como AOA, de sus aparatos 737 Max no constituyen un instrumento necesario para la seguridad de los vuelos comerciales". A pesar de ello señala que "pasará a ser un elemento estándar e independiente en este modelo".

En este sentido, Boeing insiste en que "en cada avión entregado a nuestros clientes, incluido el Max, todos los datos de vuelo y la información necesaria para operar de manera segura se proporcionan en la cabina de vuelo en la pantalla principal de la plataforma de vuelo. Esta información se proporciona a tiempo completo en el campo de visión principal de los pilotos, y siempre lo ha sido" (Accidente aéreo: el avión de Lion Air tuvo cambios de altitud y velocidad inusuales)  (Lion Air: el indicador de velocidad falló en los últimos cuatro vuelos).

Boeing insiste en señalar a los pilotos: "La vibración de los mandos y el indicador del límite de inclinación son los principales elementos usados para operar un avión en ángulos de ataques elevados (...) Ni el indicador de ángulo ni la alerta de desacuerdo AOA son necesarios para operar de manera segura el avión", indicó la compañía estadounidense en la nota.

Boeing reitera que la velocidad del aire, la altitud, la velocidad vertical, el rumbo y la configuración de la potencia del motor son los parámetros principales que utilizan las tripulaciones de vuelo para operar el avión de manera segura en un vuelo normal. La compañía aeronáutica insiste en que "ni el indicador de ángulo de ataque ni la alerta AOA en desacuerdo son necesarios para la operación segura del avión. Solo proporcionan información complementaria, y nunca se han considerado características de seguridad en aviones de transporte comercial".

En el comunicado Boeing hace una cronología donde repasa su actuación con respecto al software MCAS. Detalla que en 2017 (13 meses antes del siniestro de Lion Air con 189 fallecidos) los ingenieros de Boeing identificaron que el software del 737 MAX no cumplía correctamente con los requisitos de la alerta de desacuerdo AOA, que, según la firma aeronáutica, es activada por el software "únicamente si la aerolínea opta por activar el indicador AOA" (Ethiopian Airlines: se estrella un avión con 157 personas) (Un avión de Lion Air con 189 personas a bordo se estrella en Indonesia).

Boeing agrega que, tras investigar este problema, se determinó que "la ausencia de la alerta de desacuerdo AOA no había incidido en la seguridad del avión o en su funcionamiento" y que "el funcionamiento era aceptable".  Asimismo, concluyó que tanto la alerta de desacuerdo como su indicador podrían ser desvinculados en la siguiente actualización del software. 

En el comunicado Boeing aprovecha para subrayar que "la alta dirección" no estuvo involucrada en esta revisión y que solo fue consciente después del accidente del 737 MAX de la compañía Lion Air de octubre de 2018. Según Boeing, tras lo ocurrido discutió con la FAA su alerta e indicador AOA y le informó de que "el problema no había tenido un impacto negativo en el funcionamiento o en la seguridad del avión".  Insistió en que en diciembre de 2018 la compañía creó un comité para ahondar en el problema y  llegó a la misma conclusión. Por último señala que el sistema de alerta de desacuerdo AOA en los 737 Max pasará a ser una característica por defecto e independiente con un indicador correspondiente que será opcional.

"Boeing está desarrollando una actualización de software (...) para implementar la alerta de desacuerdo AOA como una característica estándar e independiente antes de que los Max vuelvan al servicio. Cuando el Max vuelva al servicio, todas las aeronaves de producción Max tendrán una alerta de desacuerdo AOA activada y operable y un indicador de ángulo de ataque opcional", concluye el comunicado. (Boeing devuelve a los pilotos el control manual de los 737 Max).