La final de la Champions está provocando que hoteles y locales, mediante la plataforma Airbnb, hagan su agosto ofreciendo sus alojamientos por miles de euros la noche. Aunque la desesperación para sacar tajada de esta oportunidad traspasa los límites de lo impensable hasta el punto de que se está ofreciendo una clínica dental como alojamiento (Champions en Kiev: noches de hotel a más de 5.000 euros).
La clínica dental está cerrada desde hace casi un año. Sin embargo, el propietario asegura que la oficina está limpia y no huele. Consta de dos habitaciones con espacio para un colchón doble, baño y una cocina pequeña para microondas, aunque al peculiar establecimiento le falta uno de los servicios básicos; ducha. Eso sí, el anfitrión trae expresamente el desayuno a los huéspedes, algo poco usual entre los alojamientos de Kiev, según comenta el dueño.
Pues esta noticia revela lo cancerígeno para la economía y la paz social de querer violentar la pura REALIDAD. Una clínica es una clínica ¡tacháaaaan! Y está concebida, realizada y autorizada para unos FINES. Y un edificio de VIVIENDAS, lo mismo. Para uso RESIDENCIAL, no turístico. Del mismo modo que un HOTEL, un RESTAURANTE, un BARCO MERCANTE o una NAVE INDUSTRIAL.
Si empezamos con el "todo vale", acabaremos siendo la selva de mochileros donde TODO puede ser TODO, dependiendo de la voluntad de su dueño.
Ejemplo: Un prostíbulo donde el dueño "dice" que alquila habitaciones a prostitutas que ejercen "libremente" su "oficio" no es ningún negocio INMOBILIARIO. Es un prostíbulo y el dueño es un PROXENETA y su "inmueble" alberga una explotación humana. Y todo lo demás, MILONGAS.
Bueno..... siempre te puedes hacer un "autoapaño" en al boca, por si lo necesitas, teniendo en cuenta el precio de los dentistas aquí