El Gobierno se resiste ahora a inyectar dinero público en negocios turísticos que ya están “sentenciados de muerte”, las empresas "zombies" pese haber aprobado hace unas semanas una ayuda a Air Europa de 475 millones para evitar su quiebra, según informa El Confidencial Digital.
Ese es el planteamiento que los ministerios de Industria y Asuntos Económicos han trasladado a los representantes del sector ante unos recursos fiscales que son limitados, señala este medio, y en un escenario de elevada incertidumbre economica.
El Gobierno queire evitar sostener artificialmente en exceso a empresas que no presenten la viabilidad suficiente para afrontar el cambio de coyuntura tras la pandemia, si bien hace escasas semanas sí se apoyó el rescate de Globalia, que acumula una deuda superior a los 750 millones, que equivale a 24 veces el beneficio de la empresa en 2019.
El Ejecutivo de Sanchez quiere evitar dar subvenciones a fondo perdido a empresas que no puedan reabrir porque supondría un problema para el Gobierno con Bruselas. Desea evitar, en definitiva, que los beneficiarios de estas ayudas no puedan devolver el dinero, un problema que no frenó, en cambio, la concesión de los dos préstamos a Globalia que deberá retornar en cinco años.
Esta tesis del Gobierno de “dejar morir a las empresas”, señala este medio, una postura que está provocando el rechazo de los empresarios, que están dispuestos a plantar batalla para tener acceso a las ayudas.
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