Matilde Asían es uno de los cargos políticos vinculados al sector turístico que deja su cargo en las próximas horas tras la moción de censura ganada este viernes por el socialista Pedro Sánchez. Asían fue nombrada secretaria de Estado de Turismo en noviembre de 2016. Nacida en las Palmas, se presumía que esta inspectora de Hacienda asumiría un mayor perfil político que su antecesora, la mallorquina Isabel Borrego, pero su paso por la Secretaría de Estado de Turismo se ha caracterizado por la intrascendencia.
En este más de un año y medio en el cargo, Asían ha visto cómo la regulación de los pisos turísticos, uno de los mayores problemas del Sector, se ha impulsado desde las comunidades autónomas. Asían no ha conseguido que su departamento llevase la iniciativa en la regulación de los pisos, de manera que cada comunidad autónoma ha impuesto sus reglas del juego, muchas veces diferentes al resto de regiones, algo que han criticado grandes hoteleros que reclamaban una normativa común en toda España.
Aunque durante su etapa al frente de la Secretaría de Estado de Turismo España ha conseguido cifras récord de visitantes, la realidad es que el sector se ha visto beneficiado por la grave crisis que han padecido los competidores del Mediterráneo por el terrorismo islámico. Más que por méritos del departamento de Asían, las cifras récord han sido gracias a los problemas que ha sufrido la competencia (Sánchez presidente: hoteleros no ven impacto del cambio con el 70% del verano vendido)
Asían hubiese podido asumir un mayor protagonismo en política turística ante la escasa presencia del ministro Alvaro Nadal, más preocupado en cuestiones energéticas que en temas turísticos, como lamentaron los grandes hoteleros en el pasado Foro Preferente. Pero la canaria, de la que se creía que conocería más el sector, que se involucraría en sus problemas, que sería más activa, y que plantearía soluciones novedosas, ha tenido un perfil bastante bajo mientras ha estado al frente de la Secretaría de Estado de Turismo.
No se le puede reprochar que haya tenido malas relaciones con los actores principales del sector turístico nacional, pero poco más. Ya lo denunció Carmen Riu en el pasado Foro Preferente: ha habido inacción de la administración ante el uso turístico que se ha dado a las zonas residenciales. Asían no ha tomado ni una sola medida al respecto. Ni siquiera ha intentado poner de acuerdo a todas las comunidades autónomas para regular los usos turísticos.
El sentir inequívoco del Sector respecto a la labor política del Gobierno en materia turística queda reflejado en la portada de la revista Preferente en su edición de junio recién salida a la calle, con el asunto de apertura de que "El Turismo exige el fin del maltrato político entre el temor al 2019" (El maltrato político al Turismo, tema de portada de Preferente).
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